Rosalejo fue la primera entidad local de Extremadura en segregarse de su ayuntamiento matriz, en este caso de Talayuela.
30 años de independencia, 30 años de municipalismo y de gobierno. Una treintena de años los que celebran los y las habitantes de Rosalejo, además de turistas que han querido acercarse y participar del día festivo de esta localidad cacereña. El uno de marzo este municipio celebra lo que vienen a llamar el Día de la Independencia, en recuerdo al primero de marzo de 1994, día que se independizó del que fuera entonces su ayuntamiento matriz: Talayuela.
En este ambiente festivo y de homenaje a la historia de la localidad, el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, ha felicitado a los rosalejanos y las rosalejanas por cumplir estos 30 años, ha dicho, “que no es fruto de la casualidad, sino fruto del empeño y el trabajo de hombres y mujeres que lucharon por lo que querían y que han seguido luchando y trabajando por hacer de su pueblo un lugar para vivir”.
En un pabellón repleto de vecinos y vecinas del propio municipio y de otras entidades vecinas de Campo Arañuelo, el acto de celebración se ha visto animado por las risas y las voces de niños y niñas, que han hecho que el presidente reflexione sobre el futuro de los pueblos. “Esas voces no hay que mandarlas callar nunca, porque son la alegría y la esperanza de un pueblo, tenemos la obligación como institución y como responsables políticos de conseguir la felicidad de los ciudadanos y hacer que puedan vivir donde quieran, y para ellos seguiremos apoyando firmemente el avance de nuestros pueblos”, y ha querido expresar una vez más su reconocimiento al trabajo de los agricultores y ganaderos, y el apoyo sin fisuras a las demandas del sector ante Europa.
También lo ha hecho la presidenta de la Asamblea de Extremadura, Blanca Martín, quien ha destacado que con el trabajo de todos y de todas, “hemos conseguido que en Extremadura no se haya cerrado ningún pueblo, porque todos los pueblos, como Rosalejo, tienen los servicios básicos garantizados para poder vivir en ellos”.
Por su parte, la alcaldesa de Rosalejo, María Eugenia González, ha querido rememorar a “todas aquellas personas que lucharon en su día y que nos demostraron que juntos podemos lograr grandes cosas”.
Se ha recordado también el nacimiento de Rosalejo como pueblo de colonización, creado a finales de 1950 dentro del Plan de Regadíos del río Tiétar, un hecho que se ha tratado en las jornadas que se han celebrado esta semana, como la titulada “Arquitectura: Rosalejo, pueblo de colonos”, en la que ha participado Fernando García Nicolás, vicepresidente de Fomento y Movilidad de la Diputación, o en la titulada “Historia de una segregación”, en la que también ha participado, Fernando Ayala, responsable del servicio de Memoria Democrática de la Diputación.
Este sábado continuará la festividad con la apertura de la XV Feria del Caballo.
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